Tu hombre te arma escenas de celos y a ti te encanta que sea posesivo y te controle porque así ‘demuestra’ que te ama. Resulta que además es sobreprotector y tiene arranques de cólera, aunque tú lo justificas porque ‘se le pasa’ rápido y luego te dice que todo es porque está ‘enamorado’ de ti.
¡Despierta! Si estás pasando por esta situación, qué duda cabe, tienes por pareja a un potencial agresor que puede terminar contigo a los golpes y hasta convertirte en una víctima de feminicidio u homicidio por tu calidad de mujer.
Al respecto, la psicóloga del Sistema Metropolitano de la Solidaridad (Sisol), licenciada María Romero Huarcaya, remarca que los arranques de cólera por pequeños detalles, las actitudes posesivas, la sobreprotección y los comportamientos cuestionadores y hasta controladores de los horarios, son patrones típicos de una persona violenta que se pueden observar desde la etapa de enamoramiento.
”Marcan las horas de salida o llegada, llaman constantemente consultando la ubicación, cuestionan la vestimenta, censuran a los amigos y amigas, e incluso llegan a pedir la clave del correo o páginas sociales de la pareja”, advierte.
TODO BIEN AL PRINCIPIO
Además, la especialista alerta que los potenciales agresores y feminicidas son violentos. “En una discusión gritan, golpean puertas y hasta arrojan cosas, y luego piden perdón para continuar la relación como si nada”, puntualiza.
Lo peor es que muchos de estos sujetos son de lo más atractivos cuando se inicia la relación y convencen a la mujer de que son tan, pero tan buenos, que ellas terminan por aceptar sus excesos y arranques violentos.
“Estos hombres en un inicio son muy encantadores y seductores, por lo que generalmente atraen a mujeres que están carentes de afecto”, indica Romero.
Si aceptas a un maltratador es porque también tienes problemas psicológicos y se aconseja recibir ayuda psicológica. Tolerar la violencia no es normal.
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