En nosotros, el sudor aparece si nuestra temperatura corporal se eleva, ya sea por estar en un ambiente cálido, por hacer actividades físicas o por pasar situaciones de miedo o ansiedad. Las glándulas productoras de sudor (sudoríparas), distribuidas por todo el cuerpo, se encargaran de hacernos transpirar.
La transpiración nos permite regular la temperatura corporal y ocurre gracias a las glándulas sudoríparas que se encuentran distribuidas en el cuerpo en la hipodermis -muy abajo de la piel, exactamente bajo la epidermis y la dermis-. Las glándulas segregan el sudor hasta nuestros poros, para provocar la evaporación sobre la piel y causar un medio de refrigeración que nos mantendrá frescos y en la temperatura adecuada.
En los perros, la temperatura corporal también se eleva por las misma situaciones que ha nosotros nos hacen sudar, sin embargo la transpiración ocurre de una forma distinta.
Las glándulas sudoríparas de los perros sólo se encuentran en una pequeña área de la nariz y en las almohadillas de las patas, nos son lo suficientemente efectivas para regular la temperatura del cuerpo, por eso su organismo utiliza otro método de enfriamiento: El jadeo.
La forma en como un perro logra transpirar es con la lengua. La lengua es uno de los órganos encargados de mantener la temperatura corporal y trabaja en conjunto con las glándulas sudoríparas.
¿Cómo logran enfriarse con la lengua?
La temperatura corporal de un perro se eleva durante el juego, el ejercicio, correr, caminar, etc. Cuando un perro se siente acalorado comenzará a jadear. Durante el jadeo el perro inhala aire fresco. Después, exhala aire cálido desde sus pulmones. Esto da como resultado una forma de enfriamiento y también de transpiración para todo el cuerpo, usando su lengua como un regulador de temperatura corporal.
La realidad es que el sistema de enfriamiento de los perros no es tan efectivo como el nuestro, por eso es muy fácil que en climas calurosos o momentos de mucha actividad física los perros sufran golpes de calor. Un golpe de calor puede ser ocasionado por una exposición al sol prolongada, hacer ejercicio durante el día, permanecer dentro de un auto estacionado, entre otros, y puede provocar pérdida del conocimiento e incluso la muerte.
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