Si eres una persona impulsiva, es mejor que conozcas cinco formas en las que puedes controlar esas ganas de querer actuar sin pensar. Toma nota y aplícalos.
Cuando estamos frente a una situación difícil o emocionante, muchos solemos ser impulsivos sin medir las consecuencias. Los impulsos a veces puede tener un efecto positivo, pero la mayoría de veces no es así. El impulso por lo general es dirigido por enojos, desesperación u otras emociones parecidas. Por eso, cuando somos manejados por esto, podemos estar haciendo algo que probablemente nos arrepentiremos.
Aunque es algo difícil de hacer, a veces es mejorar demorarse unos minutos en calmarse antes de hacer algo. Aquí te compartimos cinco tips que Salud.180 publicó. Anótalos:
1. Identifica el momento y origen de los arranques de impulsividad.
2. Revisa tus emociones: enojo, tristeza, miedo, desesperación.
3. Date un tiempo fuera. Cuenta hasta 10 para afrontar la situación de una mejor manera.
4. Crea un espacio para recapacitar y pensar en las consecuencias que traerá tu comportamiento, ya sean positivas o negativas.
5. Busca una actividad que descargue los impulsos y reduzca el estrés. Un ejemplo es ejercicio, leer un libro, escuchar música.
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