La mayor parte de las veces, las contraseñas se filtran desde ataques informáticos a los servicios que las albergan. En eso los usuarios poco podemos hacer aparte de activar la doble verificación. Sin embargo, la página de seguridad State of the Net apunta a varios errores muy comunes. En la práctica, estos errores se traducen en patrones que hacen nuestras contraseñas más obvias de lo que aparentan. Tres de estos patrones son, por ejemplo:
Los patrones no se detienen ahí. State of the Net apunta cinco errores mucho más comunes de lo que pensamos a la hora de idear nuevas contraseñas. Si cometes algunos de ellos, quizá harías bien en pensar una contraseña nueva:
- Empezar la contraseña con mayúscula seguida de todo minúsculas.
- Añadir una o dos letras a una palabra demasiado corta para hacer de contraseña.
- Añadir los números solo antes o después de las letras.
- Cuando se requiere un carácter especial, utilizar un símbolo de exclamación al final de la palabra.
- No utilizar dos caracteres especiales o más en la contraseña.
Curiosamente, State of the Net no recomienda utilizar generadores de contraseñas. También explica que es mejor evitar palabras o frases lógicas en las contraseñas, empezar con una letra mayúscula, o repetir siempre el mismo tipo de carácter especial.
0 comentarios:
Publicar un comentario